martes, 13 de abril de 2010

Toulouse Lautrec



T.Lautrec,
Autorretrato ante el espejo, c.1880.


  • El peso de una vida traducido en liviandad:

         Lautrec era de familia aristocrática, al romperse las dos piernas quedó contrahecho y se amargó. Se encontró con el rechazo del padre, su madre le alentó. En el 1883 ingresa en el taller de Cormont, donde conoce a Van Gogh, Gauguin... . El referente más importante para Lautrec es Degas, se sintió atraído por los mismos temas que él: las bailarinas, los caballos... pero entre ambos hay diferencias. Degas representa un mundo mecánico, reiterativo y monótono, mientras Lautrec pinta movimientos específicos y fugaces, por ello, necesita una técnica rápida.






  • Su modo de entender el arte y su uso del dibujo:

         Lautrec supone el punto de partida para el expresionismo posterior. En un primer momento, contactó con el impresionismo, pero luego lo abandonó, porque tenía intereses diferentes. El paisaje apenas si lo practica, él se decanta por los seres vivos, sobre todo por la figura humana en movimiento. Es un gran admirador del arte japonés. Su vehículo de expresión es el dibujo. Tanto por técnica, como por actitud frente al modelo, es de gran personalidad.
         El dibujo tal y como lo usa no tiene que ver con el concepto de dibujo tradicional de raíz académica: trasladar la imagen al lienzo no le sirve sólo para reproducir la apariencia, sino también la expresión que provoca en él la visión del objeto. A través del trazo transmite sus filias y sus fobias. Hace un uso expresivo, no descriptivo del dibujo. Tiene gran capacidad para captar la psicología de lo que tiene delante: seres humanos en movimiento, gestos individualizados, bailes, actuaciones... . Es un observador preciso que a veces trata temas inadecuados. Presenta lo real, sin hacer crítica ni edulcoración. En él, el aspecto artístico siempre va por delante del tema. Junto con Gauguín es el introductor de las grandes áreas de color plano.






  • El cartel moderno:

         Lautrec es el creador del cartel moderno, introduce aspectos que influyen en la publicidad posterior. En sus carteles hay relación entre texto y letra. El cartel se dirige a convencer y requiere una imagen limpia, eficaz, y llamativa. A Lautrec le importa de modo especial el estímulo psicológico. A partir del dato visivo profundiza y capta lo personal. Al captar el rasgo personal, se decanta por el dibujo, el pastel y litografía. A Lautrec siempre le atrajo el tema de la escena y las carreras de caballos. No le atrae el mundo burgués, sino los ambientes más bajos como Montmartre. Lautrec entiende el arte como comunicación de actualidad.






  • Técnicas que Lautrec utiliza:

         Lautrec es un gran experimentador de técnicas las usa con gran maestría y mezcla unas con otras. Él suele mezclar en un mismo apunte óleo, tiza, pastel, tinta china... . La técnica mixta le permite crear diferentes efectos. Para sus apuntes prefiere un cartón marrón,sin preparar, después aplica óleo muy diluido en esencia de trementina; da una textura curiosa, ya que el cartón absorbe la esencia de trementina y en la superficie queda el óleo mate. Tampoco cubre todo el soporte y juega con el color y la textura rugosa del soporte.






  • El mito de la bohemia:

         En 1884-1893 se instala en Montmartre. Son sus años más fecundos, su problema de la bebida se agudiza, lleva una vida muy bohemia. Es ahora cuando su concepto de dibujo le lleva a deformar a la figura. Hace carteles muy conocidos de los cabarets más famosos del momento. Su primer cartel fue para el Moulin Rouge y lo realiza en 1891.  El mundo de los cabarets, conciertos y espectáculos son el punto de partida de sus litografías y pinturas.      Hacia 1891 se instala en bares de burdeles, se encontró a gusto en el entorno, se entendía con los marginados, porque él también era uno de ellos. Estos personajes contaban con un añadido, posaban desnudos ante él con gran naturalidad y lo hacían gratis. Es ahora cuando hace una serie de titografías agrupadas bajo e nombre de Ellas.




    T. Lautrec, "Moulin Rouge": La Goulue, 1891, litografía a colores (cartel), 191 x 117 cm, Milán, Civica Raccolta di Stampe Bertarelli.
     T. Lautrec, La Goulue entra con dos mujeres al "Moulin Rouge", 1892, óleo sobre cartón, 79´4 x 59 cm, Nueva York, Museum of Modern Art. 
    T. Lautrec, "Jardín de París": Jane Avril, 1893, litografía a colores (cartel), 130 x 95 cm, colección privada.

     Realizado por: Juan Carlos Rivera 2º- Bach B



  • Ramón Casas y el Cartelismo

    Ramón Casas fue uno de los precursores del cartelismo artístico en Cataluña. Sus realizaciones incorporaran una visión europea y moderna, en la que la figura femenina adquiere una singular importancia.

    En Cataluña el cartelismo se introdujo de la mano de diferentes dibujantes, entre ellos Josep Pascó, decorador de la residencia de Ramón Casas en el Paseo de Gracia de Barcelona, Alexandre de Riquer, Lidom Navarro, Llaverias, Adrià Gual entre otros.

    El 3 de diciembre de 1896 la Sala Parés celebró la primera exposición de carteles de artistas extranjeros, con obras de Tolouse-Lautrec, Chéret, Léfèvre, Hardy, Price o Robertson. La exposición tuvo mucho éxito y a partir de este momento los industriales y comerciantes catalanes dejan de tener recelos al respecto del uso del cartel. Ramón Casas se descubre como un artista imprescindible y con un estilo personal caracterizado por un dibujo sintético y realista cercano a las propuestas de Tolouse-Lautrec y Steilen. En sus trabajos sintetiza lo que han de contener los carteles publicitarios: composición sencilla, con una línea expresiva que cierra grandes masas de colores brillantes destacando sobre un fondo de color uniforme.

    Su primer cartel lo realizó para la taberna modernista "Els Quatre Gats" de la cual era fundador. Así pues, en "Sombras-Quatre Gats" el artista desarrolla su primer intento de sintetizar el ambiente que se vivía en las sesiones de sombras chinescas, que Pere Romeu representaba en su local. En el cartel presenta a los personajes que habitualmente conformaban las tertulias del local y una dama en primer plano. 







    Anís del mono, (215x110 cm),
    para Vicente Bosch, accèssit, 1898



    Cigarrillos París. Son los mejores , tercer premio del concurso organitzado por Manuel Malagrida i Casellas en Buenos Aires, 1901.



    Decoración de habitaciones,
    (74,4x48 cm), no datat  



    Ajut Infantil de reraguarda. Espera els vostres donatius,
    (73x53 cm), 1937.




    REALIZADO POR: Sara Tocino Contioso 2ºb

    martes, 6 de abril de 2010

    La mujer en la publicidad

    El sexismo se promueve de formas muy diversas. La publicidad, que vende productos e ideas, difunde en demasiadas ocasiones las diferencias y la discriminación de género. Aquí aparecen unos ejemplos del machismo publicitario en diferentes anuncios del siglo XX.

    1930: Kellogg's vitaminados para currar duro y lucir a la vez hermosa para tu marido.
    "Mientras más trabaja, más guapa parece ". 



    1952: "Si tu marido supiera que no estás buscando algo para mantener el café fresco''



    1953: ¿Es siempre ilegal matar a tu mujer?


    1953: Esta marca de ketchup se asombraba: "¿De veras que una mujer puede abrirlo?


    1961: Este anuncio de Kenwood te dice que esa maquina lo hace todo… menos cocinar ¡porque para eso ya está la mujer!



    1970: El mini se define como un coche para la "conducción simple".



    ''Siempre es bueno tener una mujer en casa''


    O también encontramos publicidad machista en televisión :

    En el spot una mujer solicita a una pitonisa que descubra en su bola de cristal cómo puede aplacar los "terribles accesos de cólera" de su marido.
    En las imágenes se ve cómo él la intimida, le cruza la cara y después se va de casa. La bruja pregunta: "¿Has pensado que tu marido trabaja muchas horas y tiene derecho a encontrar un agradable recibimiento en casa?".
    La mujer asiente sorprendida de su necedad y la pitonisa sentencia: "¡Que nunca le falte su copita de coñac Soberano!".
    Los espectadores vuelven a ver la casa donde la mujer ofrece la bebida al marido, sentado en su sillón leyendo el Boletín Oficial del Estado (!). Él agradece la atención con un cariñoso beso. ¿La conclusión de este ‘spot' de los años cincuenta? Marido alcoholizado, matrimonio feliz.



    El elemento común en la publicidad de los años 1939 a 1975 es que a ellas se les considera seres "inferiores".

    Realizado por Eva Alamillos y Pilar Cuaresma 2º B.